Omán, un país en la península Arábiga, ofrece una fascinante mezcla de antiguas tradiciones, paisajes impresionantes y hospitalidad árabe. La mejor época para visitar Omán es durante los meses de invierno, de octubre a abril, cuando el clima es agradable y más fresco. Es el momento ideal para explorar la capital Muscat, visitar fortalezas históricas, aventurarse en los impresionantes desiertos de Wahiba Sands y relajarse en las playas vírgenes de Salalah. La temporada de invierno también trae festivales culturales y eventos, como el Festival de Muscat y el Festival de Turismo de Salalah. Es importante tener en cuenta que Omán experimenta altas temperaturas durante los meses de verano, de mayo a septiembre, con calor extremo y humedad, especialmente en las regiones desérticas. Si visitas durante este tiempo, es recomendable buscar sombra, mantenerse hidratado y planificar tus actividades en consecuencia. Las estaciones intermedias de primavera (marzo a mayo) y otoño (septiembre a noviembre) también pueden ser buenos momentos para visitar Omán, con temperaturas agradables y menos turistas. Durante estas estaciones, puedes explorar los impresionantes wadis (cauces de ríos secos) que cobran vida con exuberante vegetación, hacer senderismo en las montañas Hajar o disfrutar de actividades acuáticas a lo largo de la costa. Es importante respetar las costumbres locales y vestir de manera modesta, especialmente al visitar lugares religiosos. Omán ofrece una rica experiencia cultural y belleza natural, lo que lo convierte en un destino único para explorar durante todo el año.