Hungría es un destino para todo el año, y la mejor época para visitarlo depende de tus preferencias y las actividades que desees experimentar. El momento más popular para visitar Hungría es durante la primavera (de abril a junio) y el otoño (de septiembre a octubre). Estos períodos ofrecen temperaturas suaves, flores en floración y colores vibrantes en todo el país. La primavera es especialmente hermosa con los cerezos en flor en Budapest y el campo que cobra vida. El otoño trae un clima agradable y la temporada de cosecha, con numerosos festivales de vino en todo el país. El verano (de junio a agosto) también es un buen momento para visitar, con días más largos y un ambiente animado. Esta es la temporada turística más alta, y destinos populares como el lago Balaton y Budapest pueden estar concurridos. Las temperaturas durante el verano pueden alcanzar alrededor de 25 a 30 grados Celsius (77 a 86 grados Fahrenheit), lo que lo hace perfecto para actividades al aire libre, festivales de música y explorar los baños termales. El invierno (de diciembre a febrero) en Hungría puede ser frío, pero ofrece un encanto único con sus mercados navideños, pistas de patinaje sobre hielo y cálidos baños termales. Budapest es particularmente mágico durante la temporada festiva. Es importante tener en cuenta que Hungría tiene un clima continental, por lo que las temperaturas pueden variar significativamente a lo largo del año. Empaca en consecuencia y consulta el pronóstico del tiempo antes de tu viaje. Ya sea que estés interesado en explorar ciudades históricas, relajarte en baños termales o deleitarte con la cocina húngara, Hungría ofrece algo para cada viajero durante todo el año.