Volar con un bebé puede ser emocionante y desafiante. Nuestra guía experta ofrece consejos invaluables para asegurar que usted y su pequeño tengan un vuelo tranquilo y agradable. Desde elegir los mejores horarios de vuelo hasta manejar las necesidades durante el vuelo, descubra cómo hacer que su viaje sea libre de estrés.
Volar con un bebé puede ser una experiencia emocionante pero desalentadora. Para ayudarlo a usted y a su bebé a tener un viaje tranquilo, hemos compilado una guía completa con los mejores consejos y trucos. Ya sea un vuelo doméstico corto o un viaje internacional largo, estos consejos ayudarán a garantizar una experiencia cómoda y agradable.
El primer vuelo con su bebé naturalmente traerá algo de ansiedad. Sin embargo, es esencial ser valiente y dar el paso. Comience con un vuelo corto de dos a cuatro horas antes de intentar viajes más largos. Esto ayuda a que usted y su bebé se adapten a volar sin la presión de un vuelo prolongado.
Seleccionar una hora de vuelo que se alinee con el horario de su bebé puede marcar una gran diferencia. Evite los vuelos temprano en la mañana para no interrumpir la rutina de sueño de su bebé. Para vuelos de larga distancia, los vuelos nocturnos son beneficiosos ya que su bebé puede dormir durante el viaje.
Los bebés menores de dos años generalmente viajan gratis o a una tarifa reducida, pero no tienen un asiento separado. Para vuelos cortos y medianos, es preferible un asiento en el pasillo, lo que facilita el movimiento. Para vuelos de larga distancia, pregunte sobre cunas y reserve asientos con espacio adicional para las piernas.
Pregunte a la aerolínea sobre la disponibilidad de cunas para bebés y reserve estos asientos temprano, ya que ofrecen más espacio y comodidad para usted y su bebé.
Viajar con un bebé significa que todo lleva más tiempo. Planee llegar al aeropuerto temprano para acomodar el tiempo adicional necesario para registros, seguridad y embarque. Tenga en cuenta paradas adicionales para alimentar o cambiar pañales.
No dude en pedir ayuda. Viajar con otro adulto puede hacer que el viaje sea más fluido. Pueden ayudar con el equipaje, manejar al bebé y navegar por el aeropuerto.
Diferentes aerolíneas tienen políticas de equipaje específicas para bebés. Generalmente, puede llevar un cochecito y un asiento de automóvil como artículos facturados de forma gratuita. Confirme con su aerolínea de antemano y considere un cochecito de viaje compacto que quepa en el compartimento superior.
Este cochecito es fácil de plegar, tiene una larga capota solar y un amplio almacenamiento, lo que lo hace ideal para viajar en avión.
Use ropa cómoda que permita un movimiento fácil y acceso para amamantar. Viste a tu bebé en capas para adaptarse a las temperaturas variables del avión. No olvide ropa adicional para usted y su bebé en caso de derrames o accidentes.
Prepare una lista de empaque detallada con anticipación para asegurarse de no olvidar ningún elemento esencial. Incluya artículos como pañales, toallitas, un cambio de ropa, refrigerios y comida para bebés.
Para ayudar a su bebé a adaptarse al cambio en la presión del aire durante el despegue y el aterrizaje, amamante o alimente con biberón. El movimiento de succión puede aliviar la incomodidad en los oídos.
Puede llevar comida y líquidos para bebés a través de la seguridad, ya que son excepciones a las restricciones habituales. Asegúrese de tener suficiente para mantener alimentado e hidratado a su bebé durante todo el vuelo. La mayoría de las aerolíneas también calentarán biberones y comida para bebés.
Volar con un bebé requiere preparación y paciencia. Manténgase tranquilo y recuerde que la mayoría de los pasajeros y la tripulación serán comprensivos y serviciales. Con la práctica, se convertirá en un experto en viajar con su pequeño. Disfrute del viaje y cree hermosos recuerdos con su bebé.